Muchos pudieran pensar que cantantes, locutores, pregoneros, los vecinos que a diario conversan con nosotros y hasta desconocidos con quienes intercambiamos pocas palabras no tienen nada en común. Pues sí, es la voz, ese elemento unificador que alcanza su máxima expresión con el acto comunicativo.

A propósito del día mundial de la voz, este 16 de abril, bien vale la pena detenernos en la importancia de contar con ese sonido, resultado de la vibración de las cuerdas vocales y conocer cómo prevenir trastornos que la pueden afectar.

Pero ¿Cómo saber si nuestra voz no está sana?

¿Tu voz permanece largos periodos ronca o áspera?, ¿Sientes a menudo la garganta como si estuviera en carne viva, adolorida o tensa?;¿Hablar significa un esfuerzo?

Quienes sospechen de algún problema en su voz, deben consultar a un médico para determinar la causa, en este caso los otorrinos, son los indicados para diagnosticar alguna alteración. La mayoría de estos problemas pueden revertirse si se trata la causa de origen

Si queremos cuidar la calidad de la voz, es recomendable incorporar hábitos saludables como mantenernos hidratados al beber abundante agua, especialmente quienes hacen ejercicios, o acostumbran a tomar bebidas con cafeína o alcohol. Aunque pocos lo conocen se debe evitar el uso de medicamentos que pueden resecar las cuerdas vocales, como algunos fármacos para el resfriado y las alergias.

Mantener un estilo de vida y una dieta saludables está relacionado con el cuidado de la voz, para ello no es aconsejable fumar, ni aspirar el humo de quienes lo hacen pues este irrita las cuerdas vocales. Se debe evitar comer alimentos picantes, o comer demasiado frio o caliente.

Se insiste en descansar lo suficiente, porque se ha comprobado que la fatiga física tiene un efecto negativo en la voz. Siempre que sea posible es bueno hacer ejercicios, una manera de aumentar la resistencia y el tono muscular, lo cual tributa a una mejor respiración, muy útil en el habla correcta. Los alimentos ricos en vitaminas A, E y C ayudan a mantener saludables las membranas mucosas que recubren la garganta.

Usar la voz sabiamente significa no maltratarla, no hablar mientras se está ronco o cansado. Al estar enfermo también se debe descansar la voz, pues esto produce un estrés adicional en el aparato fónico. La mejor manera de celebrar el Día Mundial de la Voz, es plantearse a título personal hacer un uso responsable de la misma, evitando todo aquello que puede representar un riesgo para ese maravilla llamada voz.