Desde hace algunos años en la provincia de Holguín diversos profesionales de la salud se han dedicado a investigar cómo hacer frente al fenómeno del envejecimiento poblacional. En la actualidad es este el fenómeno demográfico más significativo que enfrenta el país, de ahí la necesidad de proponer estrategias para propiciar una longevidad satisfactoria.

En ese sentido, el especialista de II grado en Gerontología y Geriatría, Juan Carlos Baster Moro, quien ha dedicado gran parte de su trayectoria profesional a la investigación del envejecimiento y sus diferentes aristas; relacionadas con estudios sociodemográficos, las características fisiológicas del fenómeno y su vinculación al proceso salud enfermedad expresado en el adulto mayor, centra su tesis doctoral en la necesaria formación de recursos humanos para la atención a los problemas de salud de quienes sobrepasan las seis décadas de vida.La misma se desarrolla como parte del programa en Ciencias de la Educación, de la Universidad de Holguín.

Según el también Máster en Longevidad satisfactoria, “esta formación de recursos humanos debe iniciar desde el pregrado, con los estudiantes de la carrera de Medicina. Por eso es el autor del curso propio Envejecimiento, correspondiente al Plan D de esta carrera, el cual cuenta con diversas publicaciones y participación en eventos relacionados con la temática”.

En la referida investigación se identifican las insuficiencias que presentan los estudiantes de Medicina para desarrollar el proceso salud enfermedad expresado en el adulto mayor, de acuerdo a las demandas del contexto actual. La investigación tiene como contribución a la teoría la declaración del método formativo gerontogeriátrico y el aporte de la categoría de formación gerontogeriátrica del estudiante de pregrado.

Sobre esta particularidad el autor explica que “La novedad de la investigación radica en que devela los objetivos y contenidos gerontogeriátricos necesarios al estudiante de Medicina, los cuales son transversales a la disciplina principal integradora de la carrera. De manera que dicha formación el investigador la observa en conocimientos, habilidades y valores para ese estudiante. Así, este método formativo gerontogeriátrico ha sido nominado por el investigador de forma singular, al reunir características que lo hacen distintivo, con respecto a otros métodos formativos de la Medicina”.

De manera que ese método en la investigación doctoral se instaura como la contribución teórica fundamental ante las funciones que cumple, las relaciones que establece, la vinculación que desarrolla entre actividades académicas y las acciones que ejecuta el estudiante de la carrera en las formas de organización de la enseñanza que prestigia la Atención Primaria de Salud (APS).

Este método direcciona acciones que se encuentran organizadas en tres direcciones, con el diseño de tareas para la formación gerontogeriátrica del estudiante; la ejecución de esas propias tareas y por supuesto su control y evaluación.

Asimismo, el también especialista en Medicina General Integral destaca que “Todo este proceso tiene como resultado tres grandes impactos. En primer lugar el impacto de la transformación del objeto y el campo de la investigación, el objeto es el proceso formativo del estudiante de la carrera de Medicina y el campo se enuncia en la formación gerontogeriátrica de ese estudiante. Tiene además una transformación en el propio estudiante en su forma de sentir, pensar y actuar en el proceso de atención integral hacia el adulto mayor”.

“Incluso tiene otros impactos que van más allá del mismo proceso, con efectos en la calidad de vida del adulto mayor en la familia, impactos para la comunidad en la consideración del adulto mayor en su rol activo en la sociedad, impactos para el sistema sanitario a la hora de desarrollar el proceso salud enfermedad con la calidad prevista hacia el adulto mayor e impactos también las indicaciones de las instituciones sociales que dan también atención al adulto mayor, como son las Casas de abuelo y los Hogares de ancianos”.

“También posee un impacto económico, desde el punto de vista que se hace un uso racional e indicaciones adecuadas de ayudas técnicas y de estas instituciones para el adulto mayor. Además se potencia el papel de la familia en brindar cuidados, destacándolo por encima del papel de los cuidados institucionales”.

Entre algunos aspectos relacionados con la atención gerontogeriátrica en la provincia de Holguín sobresalen la necesidad de más servicios, atenciones médicas, instituciones sociales y ayudas técnicas como bastones y prótesis, lo cual, por lógica conlleva a la necesidad de formación de recursos humanos especializados en la atención a los ancianos.

Una de las primeras acciones recomendadas para hacer frente al fenómeno demográfico del envejecimiento es empoderar a nivel social a la propia persona de la tercera edad para que se reconozca como principal protagonista y agente de su propio desarrollo.

Incluso hoy en día muchos profesionales mantienen tabúes en el manejo de la relación médico-paciente con los ancianos, otras veces existen estereotipos en los propios adultos mayores y en el núcleo familiar en el que conviven, lo cual obstaculiza las capacidades y actitudes de desempeñarse en su vida sin limitaciones.

Permanecen barreras externas, arquitectónicas y mentales que no logran darle el papel protagónico que puede tener el anciano, este tema debe abordarse con mayor profundidad tanto en el ámbito científico como social, para que el propio estudiante de Medicina perciba esta necesidad, para luego trasmitirla a los propios pacientes, así podrán ser los actores principales de este escenario demográfico, caracterizado por el aumento de la esperanza de vida y la sobrevida.

La población holguinera se encuentra envejecida en un 22,3 por ciento, lo cual indica que uno de cada cinco holguineros sobrepasa los 60 años. Las implicaciones de este fenómeno son transversales a todos los sectores de la sociedad. Y en el caso particular de esta provincia, en el último quinquenio, se ubicó en el segundo territorio a nivel de país en cuanto a cantidad absoluta de adultos mayores, con más de 197 mil 200 personas en ese rango de edad.

El ámbito de las ciencias médicas además de brindar atención médico social e integral, tiene la tarea de formar los recursos humanos dedicados y especializados en la atención a los diferentes problemas de salud de los adultos mayores.