
El Heberferon, un medicamento cubano, desarrollado por el Centro de IngenierÃa Genética y BiotecnologÃa (CIGB) para el tratamiento del cáncer de piel basocelular se emplea en el Hospital ClÃnico Quirúrgico LucÃa Iñiguez LandÃn con buenos resultados.
Según explica la especialista de primer grado en CirugÃa maxilofacial, Evelyn MarÃa Fraga Fernández, este tratamiento del carcinoma basocelular es una lÃnea de investigación que se desarrolla en los centros hospitalarios y en la Atención Primaria de Salud. Tiene como objetivo tratar con inmunoterapia el carcinoma basocelular, el cual es un tratamiento especÃfico ocho veces más efectivo que cualquier otro tratamiento probado hasta ahora, dÃgase cirugÃa convencional, microcirugÃa, electrocirugÃa y electrocauterización con resultados favorables tanto para el paciente como para el paÃs por el ahorro de recursos que representa.
En este sentido, se viene desarrollando una lÃnea investigativa en el Hospital LucÃa donde desde el año 2019 se han recibido a pacientes, momento en que se aprobó la tercera fase del ensayo clÃnico, el cual ha incluido a todos los pacientes que presentan carcinoma basal de cualquier tipo, en cualquier localización y de cualquier tamaño.
El tratamiento en sà es realizado con vacunas, con una frecuencia de tres infiltraciones por un tiempo de entre tres a nueve semanas, de ahà que existan tratamientos de nueve a 27 dosis, de acuerdo al tipo de carcinoma y su tamaño.
En cuanto a los principales resultados en el empleo del HeberFERON enfatiza la doctora Fraga Fernández que en muchos casos permite la remisión completa de la lesión, donde muchas veces no resulta necesario realizar la cirugÃa y el paciente remite con un respuesta completa, lo cual favorece que el paciente siga en consulta, pero sólo de evaluación.
Mediante la infiltración alrededor de la lesión esta alternativa terapéutica combina dos interferones, que inhiben el crecimiento tumoral y reducen o eliminan este tipo de carcinomas.
Único de su tipo, este medicamento favorece la calidad de vida de los pacientes de la más frecuente de las tumoraciones cutáneas malignas, con un empleo necesario en estadios avanzados o cuando la enfermedad se localiza en zonas complejas, cercanas a orificios vitales como los ojos, donde se dificulta el abordaje quirúrgico.