El Ministerio de la Salud Pública en la provincia de HolguÃn y en Cuba de manera general, muestra particular interés y seguimiento a las embarazadas, de ahà que velar por su bienestar sea uno de los propósitos fundamentales del Programa de Atención Materno Infantil (PAMI).
Si bien determina en el comportamiento de tasas claves como las de mortalidad infantil y materna, el quehacer de las instituciones encargadas de la atención a gestantes, puérperas y recién nacidos; también influye la responsabilidad a nivel personal y familiar, en especial si se trata de embarazadas de alto riesgo.
La familia juega un rol importante en cuanto a la atención a la gestante y a los lactantes, pues en el lugar donde ambos se desenvuelven y hay un grupo de acciones que se pueden realizar para lograr que en dependencia de factores de riesgo se accione con rapidez.
En ocasiones las familias no colaboran y se han dado casos de gestantes con patologÃas asociadas al embarazo que ante la necesidad de la hospitalización, las familias se muestran negadas al ingreso. Esta conducta errónea ha propiciado la aparición de complicaciones y morbilidades que ponen en peligro la salud de las embarazadas.
Ciertamente ante fenómenos irreversibles como el envejecimiento poblacional es vital incrementar la natalidad, pero es vital que las mujeres en edad fértil que busquen embarazarse lo más recomendable es que lleguen al embarazo en el mejor estado de salud posible.
De ahà que en cada policlÃnico de la provincia exista una consulta de Planificación familiar integrada por un grupo de especialistas multidisciplinario, ya sean obstetras, clÃnicos, cardiólogos y pediatras entre otros encargados del seguimiento a las féminas en edad fértil, que son el riesgo reproductivo y necesitan para lograr un embarazo sin complicaciones, tener aquellas patologÃas de base compensadas.
Los constantes retos de este programa en la provincia de HolguÃn, la tercera más poblada del paÃs no han impedido la atención priorizada del sector a la salud materno infantil, ejemplo de lo anterior es la tasa de mortalidad infantil alcanzada durante el recién concluido año 2022 de 4.5 por cada mil nacidos vivos, la segunda más baja del paÃs, solo antecedida por la provincia de Cienfuegos.