La fragilidad en el envejecimiento marca un estado de reservas disminuidas que resulta en una mayor vulnerabilidad a resultados adversos cuando se expone a factores estresantes.La perspectiva expuesta en el presente estudio sintetiza la evidencia sobre la fisiopatologÃa relacionada con el envejecimiento que sustenta la presentación clÃnica de la fragilidad fÃsica como un fenotipo de un sÃndrome clÃnico que es distinto del Ãndice de fragilidad basado en el déficit acumulativo.
Los autores se enfocan en integrar la evidencia convergente sobre la conceptualización de la fragilidad fÃsica como un estado, en gran parte independiente de las enfermedades crónicas, que surge cuando la desregulación de múltiples sistemas fisiológicos y biológicos interconectados cruza un umbral hacia la disfunción crÃtica, comprometiendo severamente la homeostasis.
Su interpretación postula que la fisiologÃa subyacente a la fragilidad es un sistema dinámico complejo, crÃticamente desregulado. Este marco conceptual implica que las intervenciones, como la actividad fÃsica que tienen efectos multisistémicos, son más prometedoras para remediar la fragilidad que las intervenciones dirigidas a reponer sistemas individuales. Luego, consideran cómo este marco puede impulsar la investigación futura para una mayor comprensión, prevención y tratamiento de la fragilidad, lo que probablemente preservará la salud y la resiliencia en las poblaciones que envejecen.
Referencia bibliográfica: Fried, L.P., Cohen, A.A., Xue, QL. et al. The physical frailty syndrome as a transition from homeostatic symphony to cacophony. Nat Aging 1, 36–46 (2021). https://doi.org/10.1038/s43587-020-00017-z.
