Los resultados de la “complicidad” científica de dos holguineras han comenzado a traspasar fronteras provinciales. La idea del proyecto surge en enero de 2020, cuando a una de ellas la llamaron, poderosamente, la atención las cifras de COVID-19, en China.

A la doctora, con varios años de experiencia en la asistencia médica y la Maestría de Seguridad Biológica en Salud Humana, recordó que uno de los virus estudiados fue el SARS-CoV, por lo cual conocía la posibilidad de que una pandemia afectara.

A partir de esos conocimientos, Alma Torres Gómez de Cádiz Agüero comenzó a “tejer” en su mente la hipótesis de cómo un producto natural sirviera para contrarrestar consecuencias de la COVID-19. “Así, metida en el estudio y más estudio, por dos meses, me llevaron en marzo de 2020 a tener claridad de cuál fármaco podrá servir de acuerdo con su acción sobre la fisiopatología en la enfermedad complicada por las citoquinas”.

La Asesora de Ciencias en la Dirección Municipal de Salud de Holguín recuerda que en ese momento se percató que, en el único laboratorio de Holguín en el cual podía emprender el estudio era uno del Ministerio del Interior (Minint), por lo cual sin mucha dilación buscó apoyo en la Licenciada en Biología e Investigadora (Perito) Criminalística, la mayor Rosario Iserns Hernández, quien no dudó en aceptar la atrevida encomienda.

De esta manera, las dos mujeres iniciaron un ambicioso y osado proyecto. Primero, presentaron el trabajo con la hipótesis y con metodología de la investigación en el Citma y luego a la Academia de Ciencias, después lo llevaron al Consejo Científico y Comité de Ética del Minint y Salud.

Así, quedó aprobada la investigación “Seguridad y Eficacia del producto natural «CBA-100», como coadyuvante al tratamiento de pacientes con COVID-19, para de esta manera ambas investigadoras comenzar a recorrer un camino largo y no exento de escaramuzas.

“Nos tardamos en la investigación, porque un producto que va a ser usado por personas, debe cumplir la Ruta Crítica de la Organización Mundial de la Salud. Múltiples investigaciones pre-clínicas: demostración de las propiedades del producto, Tamizaje Fito químico, control de calidad y sobre todo, el estudio Toxicológico, el cual se realizó en el Cenpalab, BioCubaFarma, Habana. Ahora esperamos encapsular en CIBHO, para emprender el Ensayo Clínico”, detalló Alma.

Las investigadoras esperan empezar en agosto la Fase I de Ensayo Clínico, para probar que “es un producto natural, con propiedades antiinflamatorias e inmuno estimulantes y antivirales, como coadyuvante para el tratamiento de pacientes asintomáticos y ligeros con COVID-19”.

Sobre algunas de las particularidades de este resultado investigativo, que ha sido presentado en múltiples eventos, como el de la Mujer Creadora, ExpoCiencia- 2023, en ExpoAnir Soluciones 2023- Cuba, en Holguín y en el VIII Encuentro de Investigación Tecnológica, en la Universidad de Sevilla, España, la doctora indicó que “se revisó el perfil de seguridad, toxicología y farmacología de la materia vegetal del cual se obtiene, que es diana de entidades científicas del mundo, por las diversas acciones farmacológicas que posee”.

En este proyecto, que ha sido acogido en importantes publicaciones, entre ellas en «Phytochemical screening«, como capítulo del Libro: Sinergia de la Investigación en STEM. Editorial 3Ciencias, Alicante, España, ha contado, además, con el concurso de varias personas y organismos, como la licenciada Nivia Leyva Aldana, guiada por la MSc. Rosa Damas Feria; también un equipo inmenso del Cenpalab, para realizar el estudio Toxicológico y FARMOX en el Tamizaje y calidad del producto, mientras que BioCubaFarma donó las cápsulas de 250 mg para el estudio.

De acuerdo con ficha técnica “el «CBA-100» eventualmente disminuye la capacidad antigénica viral, al inhibir enzimas específicas. Asimismo, potencialmente, se utilizaría como complementario para resolver la situación del déficit de medicamentos antiinflamatorios e inmuno-estimulantes, en afecciones inflamatorias crónicas, déficit inmunológico, alérgicas, autoinmunes y neurodegenerativas”.

De igual manera, en la reseña se resalta “que el impacto económico de la aplicación del «CBA-100», se presentará a corto, mediano y largo plazos, a medida que se observe su seguridad y eficacia, y se aporten nuevos resultados positivos, para resolver las situaciones de salud para las que tiene amplias posibilidades.

“La utilización en momentos en que el bloqueo impuesto por los Estados Unidos de América, impide a Cuba la compra de medicamentos, reducirían las importaciones en estas aristas. Además, presenta potencial para constituir un renglón exportable en la Industria Farmacéutica y Biotecnológica del país. El producto, al ser totalmente orgánico, no afecta el medioambiente, a lo que se le suman las propiedades antioxidantes que posee, que ayudan a mejorar el suelo donde está cultivado, al disminuir los niveles de cadmio y fósforo, entre otros minerales pesados”.

Con el pomo y sus cápsulas dentro y otras muestras de lo hecho estas dos mujeres esperaron al Ministro de Salud Pública, doctor José Ángel Portal Miranda, en el vestíbulo del hospital Vladimir Ilich Lenin, durante su reciente visita a Holguín.

Allí rodeados de muchos de los que durante todo este tiempo han seguido el empeño de las holguineras, Alma y Rosario sostuvieron un ameno diálogo con Portal Miranda, quien mostró su entusiasmo y dijo estar al tanto del proyecto de las holguineras desde su inicio, para luego reconocer que los trabajos de la Anir en el sector estaban en el primer lugar nacional, por lo que las protagonistas del «CBA-100» estarán en ExpoCuba, del 14 al 18 de julio.