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No hay desarrollo sin ciencia

Leonardo Nieves Cruz

El interés por los temas vinculados a la ciencia y el medio ambiente ha sido una constante a lo largo de la vida de Leonardo Nieves Cruz, uno de los rostros imprescindibles en la delegación del Citma en Holguín, con la que mantiene un sólido vínculo, incluso desde antes de que esta fuera constituida oficialmente.

Cuando comencé mis primeros pasos de obrero, este lugar se conocía como delegación territorial de la Academia de Ciencias de Cuba, pero mucho ha llovido desde ese entonces. La carrera de la que me gradué se relacionaba más con otros campos, pero las circunstancias me trajeron aquí.”

A ese mundo ingresó en 1983, a pesar de haberse especializado en Economía y Relaciones de Comercio en la antigua Unión Soviética. Era fácil pensar que escogería sentar las bases de su vida laboral en un centro más afín con su formación para aplicar de forma directa los conocimientos aprendidos, pero él tenía otros planes.

En un inicio trabajé en el Centro Multisectorial de Información Científica y Técnica, que hoy se conoce como Centro de Información y Gestión Tecnológica”.

El actual Especialista Superior Territorial de Políticas, se desempeña en la subdelegación de Ciencia, Tecnología e Innovación, con un sentido del deber que no decae por ningún motivo. Tiene a su cargo organizar acciones con las entidades que hacen ciencia y tributan a su desarrollo, como las universidades y las industrias.

Se toma muy en serio su cometido y nunca cesa en la búsqueda de algo nuevo para ocupar su tiempo y energías. Es de esos eternos inconformes y se muestra decidido y muy perseverante, con el fin de lograr el impacto social de lo encomendado.

Me encargo de gestionar estos procesos y también de controlarlos. De forma particular, la parte a la que más atención le presto es al funcionamiento de las asociaciones científicas y la gestión de la información para nuestro sistema territorial”.

Su intenso accionar no solamente se circunscribe a la delegación que tanto aprecia, pues Nieves, como es conocido entre sus cercanos, también se ha entregado a la noble tarea de trabajar de la mano con las nuevas generaciones y aportar muy de cerca a su formación como futuros profesionales.

Soy profesor, desde hace muchos años, de la carrera de Ciencias de la Información de la Universidad de Holguín. En función del programa de estudios de esa importantísima especialidad, diseñé una asignatura, que se da en el año terminal de ambas modalidades: Elementos de gestión de ciencia, tecnología, innovación y medio ambiente.

Esta oportunidad me permite llevar mi labor, desde el punto de vista docente y académico, a la casa de altos estudios”.

Precisamente, el hecho de rodearse con frecuencia de los pinos nuevos lo hace reflexionar sobre la necesidad de crear conciencia, en materia ambiental, desde edades tempranas, para lograr que se alcance la adultez con criterios maduros y visión sólida sobre lo esencial de las buenas prácticas, en ese sentido.

Al ser un entendido en la materia, está muy al tanto de los diversos y acelerados cambios que experimenta la sociedad, en múltiples aristas. En consecuencia, es un fiel defensor de fomentar el empleo consciente de los saberes científicos para garantizar resultados óptimos en cuanto se ejecute, sin descuidar las acciones que se requieren para proteger los hábitats de todos los seres vivos.

“Como especialista y como ciudadano de a pie me enorgullezco y aplaudo el hecho de que nuestro primer secretario del Comité Central de Partido y Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, haga énfasis en llevar a cabo una buena gestión de gobierno aplicando la ciencia y la innovación.

No hay desarrollo sin ciencia en ningún país del mundo. Esto conduce, además, a la preservación del medio ambiente. Que nuestra provincia haya sido seleccionada como destacada en el marco del Día de la Ciencia cubana, el pasado 15 de enero, es resultado de un trabajo sólido en la gestión sostenible.

Pienso que nunca nos podemos cansar de interactuar con los jóvenes en la construcción de concepciones ambientales, que deben acompañarlos desde la niñez.

En varios eventos y espacios he planteado que, aunque se suele culpar a la juventud, los mayores tampoco hemos hecho lo suficiente por la conservación del medio ambiente.

Creo que nuestras acciones deben llegar al corazón de las personas, para que asimilen la importancia de preservar el entorno en el que vivimos.
“Es necesario continuar las capacitaciones a directivos y decisores, con el propósito de hacerlos comprender que la búsqueda constante de nuevos conocimientos científicos y la aplicación de la innovación son vitales para el desarrollo de sus organismos y de la sociedad, en sentido general.

Quizá la ciencia no resuelva todos los problemas inmediatamente, pero, en muchos casos, orienta hacia el rumbo por el que se debe encaminar la solución para enmendar deficiencias con una validez demostrada, si la vía escogida no era la correcta”.

Jubilado, pero no retirado, Leonardo firmó un nuevo contrato que le ha permito mantener su puesto en un lugar indispensable en su día a día. En la delegación del Citma se siente útil y en constante superación, gracias a ese afán de crecimiento y responsabilidad, que combina con otras responsabilidades, como la que mantiene en la filial holguinera de la Sociedad Cubana de Ciencias de la Información.

Sobre su papel en el desarrollo de la peña Cultura con Ciencia y Ambiente, dirigida a promover y presentar textos, libros y autores, con una obra fructífera sobre estos temas, asegura sentirse satisfecho cada vez que logra esa especial confluencia, que permite el crecimiento colectivo.

Adoro mi trabajo y me gusta muchísimo interactuar con los demás. He impartido varios cursos de posgrado en múltiples áreas. Disfruto con la organización de nuestras actividades y eventos, como Expociencia, cuya sistematicidad y resultados lo coloca en un importante punto a nivel nacional”.

Varios reconocimientos avalan su trayectoria, como merecidos estímulos a tantos años de entrega. Algunos ocupan las paredes de su oficina, ese espacio que le sirve de guarida y lugar seguro. Verlos lo hace recordar, emocionarse y ratificar la responsabilidad que tiene consigo mismo.
“Las deferencias que han tenido conmigo no indican que mi labor llegue hasta este punto, pues, mientras tenga fuerzas, salud y capacidad, nadie puede dudar que aquí estaré”.

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Aylen M. Guerra Cruz
Lic. Ciencias de la Información
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